Cuidados de la planta bulbosa Allium neapolitanum o Ajo blanco |
En la familia de las Amaryllidaceae encontramos el género Allium, integrado por más de 1.000 especies de plantas bulbosas originarias de todo el planeta, especialmente del Hemisferio Norte. Algunas especies son: Allium neapolitanum, Allium sativum (Ajo), Allium crispum, Allium cepa (Cebolla), Allium senescens, Allium schoenoprasum (Cebollino), Allium cernuum, Allium triquetrum, Allium nigrum. Se conoce por los nombres vulgares de Ajo blanco, Ajo porro, Ojos de Cristo o Lágrimas de la Magdalena. Son pequeñas plantas bulbosas perennes que no suelen superar los 30 cm de altura. Las delicadas hojas, de un atractivo verde brillante, tienen forma linear y surgen de la base de la planta. Las vistosas y pequeñas flores blancas brotan, en gran número, en umbelas terminales. Florecen en primavera. Se emplean principalmente para formar grupos en sotobosque, en lugares del jardín de acceso difícil y para crear manchas de color en prados y césped. También se emplea como flor cortada. Hay que tener en cuenta que la planta huele a ajo. El Ajo blanco prospera en exposiciones de semisombra o de sombra y con temperaturas templadas, pudiendo tolerar alguna helada esporádica y de baja intensisdad. No es exigente con el tipo de suelo pero prefiere que contenga humus o algo de materia orgánica. El Ajo porro es una planta de muy fácil cultivo que es mejor dejar a su aire, sin cuidados particulares. El Ajo blanco es una planta rústica y resistente a las habituales plagas y enfermedades. La forma más sencilla de propagarlos es a partir de los bulbos tras la floración. |
Fotos de la planta bulbosa Allium neapolitanum o Ajo blanco |