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Cuidados de la planta Phoenix roebelenii o Palmera enana.

Cuidados de la palmera Phoenix roebelenii o Palmera enana

En la familia de las Arecaceae se incluye el género Phoenix formado por unas 11-15 especies de palmeras procedentes de las Islas Canarias, África y Asia. Algunas especies son: Phoenix roebelenii, Phoenix dactylifera, Phoenix canariensis, Phoenix theophrasti, Phoenix reclinata, Phoenix sylvestris.

También se conoce por los nombres vulgares de Palmera enana, Palmera robeleni, Palmera pigmea y Datilera enana. Es una especie originaria del sudeste asiático.

Son palmeras de crecimiento lento que en su hábitat natural pueden alcanzar los 5 metros de altura pero que no suelen superar los 2 metros. Sus elegantes hojas miden casi 1,5 metros y están formadas por segmentos de un bello color verde brillante y miden hasta 20 cm de longitud; aunque son la mayoría flexibles los segmentos cercanos al tronco son punzantes. Las flores son pequeñas y amarillas y surgen en panículas de casi medio metro de longitud. Florecen en primavera pero en interiores no suelen hacerlo. El fruto es comestible y tiene forma de drupa oscura.

Se suelen emplear como plantas de interior en grandes macetas y como ejemplares aislados o en pequeños grupos en jardines de clima cálido o mediterráneo.

La Palmera enana necesita una exposición de sol directo o de semisombra. En interiores es recomendable que reciba algunas horas de sol. Son capaces de resistir alguna helada corta y esporádica de hasta unos -3 ºC.

Aunque pueden prosperar en variados tipos de suelo es recomendable uno que drene bien y contenga materia orgánica. En caso de trasplante conviene hacerlo en primavera con mucho cuidado pues posee espinas.

Regar de forma frecuente para que el terreno no llegue a secarse nunca por completo. En verano se suelen regar unas 3 veces por semana si hace mucho calor. En invierno será suficiente con un riego cada 15 días.

Durante la primavera y el verano se les puede abonar con un fertilizante para plantas de interior cada 15-20 días.

Más que poda lo que necesita es una retirada periódica de las hojas marchitas.

Estas palmas no suelen presentar graves problemas de plagas y enfermedades.

La propagación se lleva acabo a partir de semillas sembradas en semillero en otoño o en primavera si bien es un proceso lento ya que pueden tardar más de 3 meses en germinar.

Fotos de la palmera Phoenix roebelenii o Palmera enana

Phoenix roebelenii
Phoenix roebelenii
Phoenix roebelenii
Phoenix roebelenii