Son pequeños insectos coleópteros de 1,5 cm de largo (especies europeas), color gris ocre y una característica cabeza terminada en trompa.
Los gorgojos adultos se alimentan de la savia de las plantas, especialmente en verano. A través de las succiones de savia pueden entrar enfermedades criptogámicas (hongos) en las plantas.
Por su parte, las larvas de estos bichos son más peligrosas pues se alimentan de tallos jóvenes y de hojas (sobretodo de sus bordes).
Existen diferentes especies:
- Curculio nucum (gorgojo del avellano): Son de color grisáceo y miden 1,2 cm de largo. Los ejemplares hembra ponen huevos en el interior de las avellanas y la larva se alimenta del fruto dejando la cápsula vacía.
- Hylobius obietis (gorgojo grande): Son de color marrón con pelillos amarillos y de 1,5 cm de largo. Las larvas se alimentan de las raíces tiernas de las coníferas (abetos y pinos).
- Anthonomus piri (gorgojo del peral): Las larvas devoran en invierno las yemas florales impidiendo la floración de la planta.
- Anthonomus pomarum (gorgojo del manzano): Las larvas de este insecto acaban con las yemas florales de los manzanos.
- Attelabus nitens (enrollador de las hojas del roble): Las hembras enrollan las hojas de los robles para depositar los huevos que eclosionan en primavera y cuyas larvas se comen las hojas.
- Rhynchites betulae (enrollador de las hojas del abedul): Es igual que el gorgojo anterior pero ataca a los abedules.
- Pantomorus y Stariodis: Son pequeños gorgojos (menos de 1 cm) cuyas larvas acaban con las hojas de plantas como: jazmines, hortensias, hiedras, cinerarias, camelias y aralias.
Para combatir estos insectos recomendamos acudir a un buen centro de jardinería, adquirir los productos adecuados y seguir las indicaciones del fabricante.