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Cuidados de la planta suculenta Lampranthus amoenus o Lampranto

En la familia de las Aizoaceae se halla el género Lampranthus compuesto por unas 250 especies de plantas suculentas originarias de Sudáfrica. Algunas especies de este género son: Lampranthus amoenus, Lampranthus zeyheri, Lampranthus blandus, Lampranthus multiradiatus, Lampranthus spectabilis, Lampranthus aureus, Lampranthus falcatus.

Recibe el nombre vulgar de Lampranto y también el sinónimo científico de Mesembryanthemum amoenum.

Son plantas suculentas de porte rastrero con tallos rojizos que apenas superan los 15 cm de altura. Presentan pequeñas hojas perennes casi cilíndricas y carnosas de color verde-gris que se pueden volver rojizas con el sol intenso. Producen unas abundantes y vistosas flores brillantes de color púrpura. Florecen desde finales de primavera hasta principios de verano.

Se suelen emplear en rocallas, en borduras y para crear macizos cobertores; además son aptas para macetas en terrazas y balcones. Toleran la salinidad del ambiente.

El Lampranto prospera bien en una exposición de pleno sol y, aunque no les gusta el frío pueden resistir heladas esporádicas y de baja intensidad (-5 ºC). En regiones de inviernos fríos conviene protegerlas.

Estas plantas de crecimiento lento viven en cualquier tipo de suelo que esté bien drenado, incluso en los más pobres. La plantación o el trasplante conviene hacerlos en primavera.

Son resistentes a la sequía por lo que los riegos serán moderados; esperar a que la tierra se seque bien antes de volver a regar.

Aunque no es necesario se pueden abonar a finales de invierno con un ligero aporte de compost.

Tras la floración conviene ir podando las flores marchitas y las ramas secas o deterioradas.

Su principal enemigo es el exceso de riego que puede pudrir las raíces.

Pueden propagarse a partir de semillas sembradas hacia finales de invierno o a principios de primavera, por división de mata y mediante esquejes.

Fotos de la planta suculenta Lampranthus amoenus o Lampranto