Cistus monspeliensis o Jaguarzo negro

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Cuidados del arbusto Cistus monspeliensis o Jaguarzo negro

Unas 20 especies (y algunos híbridos) de arbustos aromáticos oriundos de la Cuenca Mediterránea componen el género Cistus (familia de las Cistaceae). Algunas especies son: Cistus monspeliensis, Cistus albidus, Cistus ladanifer, Cistus x skanbergii, Cistus creticus, Cistus parviflorus, Cistus x skanbergii, Cistus salviifolius, Cistus x pulverulentus.

Se conoce por los nombres vulgares de Jaguarzo negro, Estepa negra, Jara negra y Jara de Montpelier.

Son arbustos perennifolios muy ramificados con tallos de color rojizo que pueden superar el metro de altura. Sus hojas y tallos desprenden un agradable aroma; dichas hojas son estrechas y de color verde oscuro que se pueden volver negruzcas en época de sequía. Producen vistosas flores blancas de unos 3 cm de diámetro. Florecen en primavera.

Estas plantas de fácil cultivo y bajo mantenimiento son muy apropiadas para su uso en rocallas, taludes de difícil acceso y en áreas secas y soleadas del jardín. Resultan muy indicadas para jardines costeros mediterráneos.

La Estepa negra necesita una exposición de pleno sol y climas secos. Tienen buena resistencia al frío y a las heladas de hasta unos -10 ºC.

Prosperan en suelos pobres, arenosos o pedregosos. Lo importante es que el drenaje sea excelente.

Casi no necesitan riego pues son capaces de vivir con el escaso régimen de lluvias del clima mediterráneo. Si el verano es muy caluroso pueden regarse esporádicamente.

No son necesarios los abonos.

Se recomienda una ligera poda tras la floración para mantener un porte compacto y favorecer la siguiente floración.

Son plantas resistentes a las habituales plagas pero sensibles a las enfermedades fúngicas (hongos) producidas por un exceso de humedad.

Se pueden propagar mediante esquejes realizados en verano tras la floración o a partir de semillas sembradas en primavera.